Jan Oblak es un futbolista esloveno que juega como portero en el Atlético de Madrid de la Primera División de España. Lleva el dorsal 13 en su camiseta. Es internacional con la selección de fútbol de Eslovenia, donde se disputa el puesto con el portero del Inter Samir Handanovic. Su debut como profesional fue con 16 años, en el NK Olimpija Ljubljana de su país. Después de jugar en el equipo esloveno, pasó a formar parte de la plantilla del Benfica portugués, donde ganó la Liga NOS, la Copa de Portugal y la Copa de la Liga en 2014, antes de ser traspasado al Atlético de Madrid, donde juega en la actualidad, y es uno de sus jugadores más importantes, sino el que más. En 2014, el Benfica disputó la final de la Europa League en el Juventus Stadium contra el Sevilla, con Jan Oblak como titular, y cayó en penaltis en el partido que dio al Sevilla su primera Europa League de las tres que ganaría de manera ininterrumpida.
Oblak subió al primer equipo del Olimpija Ljubljana en 2009, con tan solo 16 años, como ya he contado antes, tras jugar seis temporadas en el filial. Solo pudo demostrar su valía en Eslovenia durante un año, ya que en 2010 el Benfica pagó aproximadamente cuatro millones de euros por él y se hizo con sus servicios. Pero solo jugaría en el club lisboeta una temporada, porque encadenaría cuatro cesiones consecutivas en el SC Beira-Mar, SC Olhanense, Uniao Leiria y Rio Ave. Como ya he mencionado, regresó al Benfica en 2013 para jugar solo una temporada antes de firmar por el Atlético, y ganó tres títulos (Liga, Copa y Copa de la Liga) además de llegar a la final de la Europa League contra el Sevilla en Turín, donde perdió en la tanda de penaltis.
Ese verano, el Atlético de Madrid se hizo con sus servicios tras pagarle al Benfica 16 millones de euros. Firmó un contrato por seis temporadas, hasta 2020, y en principio llegaba como apuesta de futuro, porque iba a ser el suplente de Moyà, un portero ya contrastado. Llegó al Atlético con tan solo 21 años, y eso le daba muchísimo margen para crecer como futbolista en la ciudad de Madrid. El 22 de agosto ganó su primer título como colchonero, la Supercopa de España frente al Real Madrid, donde lamentablemente no dispuso de minutos, a pesar de ser convocado tanto en el Bernabéu como en el Calderón. El 16 de septiembre debutó de manera oficial con los rojiblancos, en la primera jornada de la Champions League, donde no pudo impedir que su equipo cayera por 3-2 ante el Olympiacos en Grecia. En la primera parte de la temporada, el dorsal número 13 fue relegado a la suplencia en detrimento de Moyà, y solo disputaría los partidos de la Copa del Rey, que serían ante L'Hospitalet, Real Madrid y Barcelona en cuartos de final, donde caería por un global de 4-2. En la ida, Oblak detuvo un penalti a Messi, pero el 10 del Barcelona no fallaría después en el rechace. Casualmente, esta sería la única temporada donde se vería a Oblak defender la portería del Atlético en la competición de Copa del Rey, ya que durante las siguientes sería el titular tanto en la liga como en Europa (Champions y Europa League, esta última a partir de dieciseisavos en la temporada 2017-18) y en la Copa del Rey alternaría banquillo y grada durante todas las temporadas siguientes, siendo el titular Moyà, Werner o Adán, por ejemplo. Ahora suele ser más grada que banquillo, o incluso ni viaja, como se pudo comprobar en la eliminatoria ante la Cultural Leonesa en enero de 2020, donde Simeone dejó en casa a Oblak y Morata al tratarse de un rival asequible según él, y se quedó fuera por confiado. En una Copa a partido único tienes que apostar por tu portero titular porque el suplente no tiene ninguna o poca experiencia en eliminatorias de este tipo, ya que una derrota te manda para casa. En 2017, hubo una eliminatoria de semifinales entre Barcelona y Atlético, y ni Ter Stegen ni Oblak fueron convocados a ninguno de los dos partidos, y eso hizo perder un poco de salsa a la eliminatoria. Pero da igual, ni aunque sea un derbi, que Oblak no volverá a ser convocado a un partido de copa. Yo en partidos de este tipo lo convocaría e incluso sería titular. Y si no va a jugar, ni viaja. No va a viajar para calentar el banquillo. Sin más dilación, seguimos con la biografía de Jan Oblak.
En la temporada 14-15, su primera como colchonero, en un principio solo jugaría la copa. Fue titular en un partido de Champions, contra el Olympiacos griego. Y perdió el Atlético 3-2. En Liga, ni discusión. Moyà era el titular. Y después de jugar ante los griegos, tuvo que esperar a un amistoso con Eslovenia para volver a ser de la partida. Y a partir de ahí, jugó tres eliminatorias de Copa del Rey, siendo todos los partidos de Liga suplente. Después de caer eliminado contra el Barcelona, tras perder 2-3 en el Calderón, Oblak fue suplente en ocho partidos seguidos, siete de Liga y uno de Champions, la ida ante el Leverkusen. Pero la situación le cambiaría a partir del 17 de marzo, día de la vuelta en el Vicente Calderón contra el equipo alemán. El Atlético tenía que remontar el 1-0 encajado en el BayArena, y a los 23 minutos Moyà se lesionó y tuvo que ser reemplazado por el portero fichado esa misma temporada. En el minuto 27, el Atlético marcó el único tanto del partido, gol con el que forzaría la prórroga y posteriormente los penaltis al no haberse anotado más. Oblak detuvo el primer penalti del cuadro alemán y solo encajó dos de los cinco que le tiraron, y el equipo del Calderón consiguió el pase a cuartos al anotar tres penaltis por dos del Leverkusen. Desde el partido de vuelta ante el Leverkusen, Oblak fue titular en todos los partidos hasta final de temporada, incluidos dos derbis más de Champions ante el Madrid, en los que tras la ida disputada en el Calderón fue nombrado MVP del partido (paró un mano a mano a Bale) y posteriormente fue incluido en el once de la semana de la UEFA. Jugó 14 partidos seguidos con el Atlético, hasta concluir la Liga con un empate sin goles ante el Granada. Fue titular en el partido que coronó al Barça campeón de Liga en el Calderón.
A partir de la temporada siguiente (15-16) Simeone decidió apostar por Oblak como su portero titular en Liga y Champions, confiando en que el 13 hiciera olvidar a su predecesor, Courtois, que casualmente llevó el mismo número en su etapa como colchonero. Oblak jugó dos amistosos ante Oviedo y Betis, ambos como titular, y jugó desde la jornada 1 contra Las Palmas en el Calderón hasta, como estaba previsto, la ida de Copa contra el Reus. Esa temporada Oblak sí se sentó en el banquillo durante la Copa, ya he mencionado que yo no le convocaría si no es para jugar. Luego disputó dos partidos de Liga y uno de Champions antes de volver a calentar banquillo ante el Reus. A continuación, tres partidos más de Liga, y banquillazo en Vallecas en Copa. Juega en Balaídos en la victoria 0-2 del Atlético, y banquillazo nuevamente ante el Rayo pero en casa. Partido de Liga ante Las Palmas, y banquillazo en el campo donde había jugado diez días antes, Balaídos, en un empate sin goles entre Celta y Atlético. Empate sin goles ante el Sevilla, y nuevo banquillazo ante el Celta, en la eliminación del Atlético de la Copa del Rey tras caer 2-3. Desde el partido de Liga en el Camp Nou, derrota 2-1, no volvió a quedarse sin jugar en lo que le restaba de temporada. El Atlético logró eliminar al Barça de la Champions, tras caer 2-1 en el Camp Nou como en Liga, y ganar 2-0 en el Calderón con dos goles de Griezmann. Oblak había sido titular anteriormente en los dos partidos ante el PSV, donde el Atlético logró ganar en la tanda de penaltis en el partido del Calderón por 8-7. Juanfran anotó el penalti decisivo. Y también jugó 2 amistosos con Eslovenia. El Atlético quedó emparejado en semifinales de la Champions con el Bayern de Múnich. En la ida, los del Calderón ganaron 1-0. Y en la vuelta Oblak paró un penalti de Thomas Müller en la derrota 2-1 del Atlético, siendo decisivo para el pase de los atléticos a la final de Milán. Oblak terminó la Liga contra Levante y Celta, perdiendo en Valencia y ganando en el Calderón a los celestes. Y después llegó la final de Milán, donde esperaba el Real Madrid. Dos años después, con cambios en ambas plantillas, los dos equipos volvían a encontrarse en una final de la Liga de Campeones. Principalmente en la portería, donde Casillas y Courtois dejaron sus sitios a Keylor Navas y Oblak. Y en la delantera del Atlético ya no estaban Villa y Diego Costa, y sí Griezmann y Torres. Oblak evitó varios goles del Madrid, en especial uno de Casemiro y otro de Benzema. Y en la tanda de penaltis no pudo evitar una nueva Champions conseguida por el Madrid. No paró ninguno de los 5 lanzamientos. Y así acabó la temporada Oblak. Temporada tras temporada, hay algunos equipos que pretenden al esloveno para reforzar su portería, pero la ya leyenda del Atlético lo tiene bastante claro, no se mueve de la capital de España. Con su selección fue titular en los 10 partidos de clasificación para el Mundial 2018. Clasificación que, desafortunadamente, no ha podido lograr.
Oblak comenzó la temporada 2016-17 siendo titular en un amistoso frente al Tottenham. Después comenzó la Liga recibiendo en el Vicente Calderón al Alavés, donde nada pudo hacer para evitar un gran gol de Manu García. Luego empató otro partido, en Butarque (fue el primer portero visitante en jugar allí en Primera) y ganó su primer partido de Liga en Vigo ante el Celta por 0-4. En el estreno en Champions, PSV y Atlético volvían a verse las caras después de la eliminatoria de la temporada anterior que finalizó con victoria rojiblanca. El Atlético logró salir victorioso de Holanda con un gol de Saúl y un penalti que consiguió parar Oblak a Andrés Guardado. Tras la Champions, Oblak fue titular en tres partidos de Liga más, incluido un empate en el Camp Nou, y después de vencer al Deportivo en el Calderón esperaba otro viejo rival, el Bayern de Múnich. Una diana de Carrasco dio el triunfo a los madrileños. Y Griezmann falló un penalti. Oblak fue decisivo con algunas paradas. Después del Bayern, otro rival chungo: el Valencia en Mestalla. El Atlético logró salir con los 3 puntos a pesar de que Griezmann y Gabi fallaron un penalti cada uno. Posteriormente, el Atlético vence por 7-1 al Granada, con un gran gol de Isaac Cuenca para los nazaríes, ante el que nada pudo hacer Jan Oblak. Luego jugó ante el Rostov en Champions y ante el Sevilla en Liga. Ante el Málaga se habló de que el gol de Sandro Ramírez de falta directa se prvoduce por un fallo suyo. Pero el Atlético logró conseguir el triunfo. Otra vez le tocó jugar ante el Rostov, con victoria 2-1. Y luego llegaron dos derrotas, ante la Real Sociedad y en el derbi ante el Real Madrid, con una parada de Oblak a Cristiano Ronaldo que el portugués reclamó como gol. El Atlético venció después por 2-0 al PSV, y 0-3 ante Osasuna a domicilio, con un penalti parado de Oblak a Roberto Torres. Le siguieron un empate 0-0 ante el Espanyol y una derrota por 1-0 en Múnich contra los de Ancelotti. En la derrota ante el Villarreal, Oblak tuvo que abandonar el campo por una lesión a los 40 minutos. Sufrió una lesión que le dejó en el dique seco hasta el 21 de febrero, fecha en la que volvió a viajar con el equipo. Se perdió, entre otros partidos, una pedazo de eliminatoria ante el Barça en la Copa del Rey. En esa eliminatoria ni él ni Ter Stegen, su gran rival por el momento, fueron de la partida, y eso que el portero alemán estaba en condiciones de ser alineado. Pero jugaron tanto Moyà como Cillessen, y la eliminatoria perdió algo de salsa, como ya comenté hace un rato. Oblak viajó a Alemania, para jugar ante el Leverkusen, pero no quisieron arriesgar con él y el titular acabó siendo Moyà. Pero después del viaje a Alemania, esperaba otra vez el Barça después de haber eliminado a los colchoneros en la Copa, pero esta vez el partido era de Liga. Ahí sí que Oblak fue titular, y Ter Stegen igual. El esloveno hizo una parada extraordinaria a Piqué y otra a Messi. Y fue titular en el accidente de Torres en Riazor. Luego, fue titular ante Granada y Valencia, antes del regreso de la Champions. En el regreso de la Champions, Oblak nos dejó una triple parada ante Volland y Brandt, por la que se recordará este partido. El Atlético pasó a cuartos, y le esperaba el Sevilla, al que venció por 3-1, ese fin de semana. Después ganaron dos partidos, ante el Málaga y la Real Sociedad, antes de medirse al Madrid en el Santiago Bernabéu. En dicho partido, el resultado fue de empate a uno, y tanto Oblak como Keylor Navas fueron decisivos para que sus respectivos clubes puntuaran. Después de esto, el Atlético logró superar en casa a Leicester y Osasuna, antes de volver a enfrentarse al Leicester en Inglaterra. En ese partido, a pesar del empate, el Atlético se clasificó a semifinales. Después de jugar en Inglaterra, ganó 0-1 en Barcelona al Espanyol, y perdió sorprendentemente en casa ante el Villarreal por el mismo resultado. Antes de la semifinal de Champions, vencieron a Las Palmas en Gran Canaria por 0-5.
Una semifinal de Champions que iba a suponer el reencuentro de los del Calderón con el Real Madrid. El partido de ida esta vez se disputó en el Bernabéu. El Atlético vistió con su indumentaria negra y amarilla. A pesar de perder 3-0, con tres dianas de Cristiano Ronaldo, Oblak evitó una goleada mayor haciendo algunas buenas intervenciones. Posteriormente, fue titular ante el Eibar en casa, partido que ganó el Atlético por 1-0. Antes de afrontar el último partido de Champions en el Vicente Calderón, que el azar quiso que fuera un derbi ante el Real Madrid, la vuelta de semifinales de Champions. Oblak fue titular, pero el Atlético no pudo pasar a la final, a pesar de que el esloveno hizo una gran parada a Kroos en la jugada del gol del Real Madrid. El equipo rojiblanco se había adelantado 2-0 tras un cabezazo de Saúl y un penalti de Varane a Torres transformado por Griezmann.
Después de caer una vez más ante el Madrid, Oblak terminó la Liga siendo el titular ante el Betis en el Villamarín y en el último partido del Atlético en el Vicente Calderón, ante el Athletic. El equipo colchonero ganó 3-1, y Oblak fue el último portero del Atleti en jugar oficialmente en el mítico estadio rojiblanco. El Calderón vivió posteriormente la final de la Copa del Rey, entre Barça y Alavés, y finalizó con un título del equipo de Luis Enrique.
La siguiente temporada empezó para Oblak en la Audi Cup que se disputó en el Allianz Arena de Múnich. Fue titular en la semifinal ante el Nápoles, con victoria para el Atlético por 2-1, con un penalti parado por el esloveno a Milik. También disputó 45 minutos en un amistoso ante el Toluca, y dos partidos enteros ante Brighton y Getafe. A Oblak le tocó ser el portero visitante que inauguraba otro estadio en Primera. Esta vez fue en Montilivi, estadio del Girona. Vio cómo el Atlético empezaba perdiendo 2-0, con un doblete de Stuani, pero logró remontar hasta lograr el empate final. En la jornada siguiente, fue titular ante Las Palmas, con victoria por 1-5, y un penalti detenido a Jonathan Viera. Fue de la partida en Mestalla y en el Olímpico de Roma para estrenarse con el Atlético en esa Champions. Ambos partidos acabaron sin dianas. En el siguiente partido fue el titular en el estreno del Metropolitano, en una victoria por 1-0 ante el Málaga. El Atlético volvió a vencer, esta vez en San Mamés, por 1-2, con un penalti parado de Oblak a Aritz Aduriz. Después Oblak jugó en casa ante Sevilla y Chelsea, y en el enfrentamiento ante los de Stamford Bridge se midió a su predecesor en la portería del Atlético, Courtois. El Atlético ganó ante el Sevilla y cayó en el estreno europeo del Metropolitano. A continuación, el esloveno fue de la partida en tres empates seguidos, ante el Leganés, el Barça y el Qarabag. Y en un partido a puerta semicerrada en Vigo ante el Celta, que el Atlético logró ganar por 0-1 gracias al gol de Gameiro. Al volver de Vigo, Oblak jugó en dos empates a un gol ante el Villarreal y el Qarabag. Fue titular en Riazor. Y en el polémico primer derbi del Wanda. Jugó ante la Roma, victoria 2-0 (esto le dejaba la clasificación a mano, solo tenían que puntuar ante el Chelsea y esperar a que la Roma pinchase ante el Qarabag. Pero eso no sucedió. El Atlético empató 1-1 ante los londinenses y la Roma se impuso con claridad a los azeríes) Después de la Roma jugó ante Levante y Real Sociedad antes de jugar el mencionado encuentro ante el Chelsea. El Atlético finalizó tercero en su grupo y se clasificó para dieciseisavos de la Europa League. Después de eso fue titular en el Villamarín, contra el Alavés y en el campo del Espanyol. En dos de ellos dejó la meta a cero y en uno cayó por la mínima. Posteriormente disputó 32 minutos en un amistoso ante el Al-Ahly. Un partido que el Atlético logró ganar con 3 dianas del francés Gameiro. El día de Reyes fue titular ante el Getafe, en una victoria 2-0. Jugó dos encuentros más contra Eibar y Girona antes de ir convocado por primera y única vez en la Copa del Rey en la vuelta de cuartos ante el Sevilla. Ante los palanganas se quedó fuera de la Copa del Rey. Se perdió por lesión la ida de dieciseisavos de la Europa League ante el Copenhague. Y encadenó 5 partidos seguidos sin recibir un gol en contra, contra Las Palmas, Valencia, Málaga, Athletic y la vuelta de la Europa League. Fue titular en el Pizjuán, en una victoria por 2-5. Dejó la puerta imbatida en la exhibición de Griezmann (4 goles) ante el Leganés. Cometió un fallo que dio un gol de falta a Messi contra el Barça en el Camp Nou (1-0). Portería imbatida ante el Celta (3-0) y derrota en Villarreal (2-1). Encadena dos puertas a cero ante Deportivo y Sporting de Lisboa en casa. Todo ello antes de visitar el Santiago Bernabéu, donde salvó al Atlético de una derrota que debió sumar al estar Griezmann en fuera de juego en la acción del gol del equipo del Wanda. En especial, una magistral falta lanzada por Sergio Ramos que se colaba en la portería colchonera. Posteriormente disputó la vuelta ante el Sporting. Jugó nuevamente ante Levante, Real Sociedad y Betis. Victoria, derrota y empate. Todo eso antes de afrontar una pedazo de eliminatoria de semifinales de la Europa League ante el Arsenal. Jugó la ida, en Londres, con resultado de empate a uno. Y la vuelta, que el Atlético ganó por 1-0, y se clasificó para la final de Lyon contra el Marsella. Fue titular ante Espanyol (0-2) y Getafe (0-1) siendo decisivo en la victoria en el estadio azulón parando un penalti de Fajr. Ganó su primera Europa League al ganar 0-3 ante el Marsella en la final, siendo Oblak titular. Terminó la Liga siendo titular en el empate 2-2 ante el Eibar en la despedida de Fernando Torres del Atlético de Madrid. Acabó la temporada con su club siendo titular en un amistoso ante un combinado de futbolistas nigerianos, y jugando 45 minutos. Posteriormente jugó los 10 partidos de clasificación para la Eurocopa con Eslovenia, clasificación que tampoco logró. Aprovecho para decir que los fue jugando a lo largo de la temporada 18-19.
Oblak empezó la temporada con su club siendo titular ante el Arsenal y el Cagliari, jugando 45 minutos en cada partido. Jugó los 90 minutos en un partido de International Champions Cup ante el Inter en el Metropolitano. Y jugó la Supercopa de Europa ante el Real Madrid en Estonia, ganando su primer título de Supercopa europea con el Atlético al imponerse 2-4 a su eterno rival.
Empezó la liga siendo titular en una apasionante primera jornada ante el Valencia en Mestalla que finalizó con empate a uno. Jugó luego ante el Rayo en casa (1-0) y en el estadio de Balaídos ante el Celta, donde no pudo evitar que su equipo cayera por 2-0. Y evitó el tercer gol del Celta, con una parada a Aspas. En el siguiente encuentro, el Atlético empató sobre la bocina con una diana del jugador del filial Borja Garcés. Era contra el Eibar en casa.
Es titular nuevamente en el partido de Champions ante el Mónaco. Y contra Getafe y Huesca en Liga, encadenando dos porterías imbatidas. Todo ello antes de afrontar el derbi en el Santiago Bernabéu. En ese partido evitó que el Real Madrid se llevara la victoria al impedir un gol de Marco Asensio. También evitó otro de Carvajal. Y el Atlético logró sacar un punto del campo del Madrid al empatar 0-0. Titular nuevamente en Champions ante el Brujas y en dos encuentros de Liga ante Betis y Villarreal. Antes de jugar en Champions contra el Borussia Dortmund. Un partido que el Atlético perdió 4-0 de forma humillante.
Posteriormente, jugó contra la Real Sociedad y el Leganés, ganando un partido y empatando el otro. Volvió a jugar ante el Borussia en casa para esta vez ganar por 2-0.
En Liga, jugó en la victoria sobre la bocina ante el Athletic Club, una victoria que los del Wanda no habrían logrado sin la intervención del VAR, que había anulado un gol de Godín. Oblak fue decisivo parando una clara ocasión de Williams.
Después del Athletic les esperaba el Barça en el Wanda. El resultado fue de empate a uno, con tantos de Diego Costa y Dembélé.
Volvió a jugar su cuarto partido seguido en casa ante el Mónaco en Champions, con victoria por 2-0.
Contra el Girona, el VAR le señala un penalti sobre Stuani que inicialmente se había pitado fuera del área. El uruguayo consiguió batirle, y el partido finalizó con empate 1-1. Estuvo en el banquillo en la vuelta de Copa ante el Sant Andreu. Jugó ante el Alavés. Y ante Brujas y Valladolid a domicilio. Juega ante el Espanyol y se marca un gran partido en el Sánchez Pizjuán contra el Sevilla, donde a pesar de sus grandes paradas no puede evitar el pinchazo de los madrileños. 1-1 en Sevilla. Ve los 180 minutos de la eliminación del Atlético en Copa a manos del Girona en el banquillo. En especial el gol de Doumbia en el último segundo de partido, que neutralizaba el conseguido por Griezmann. Entre medias juega ante el Levante. Y regresa a la titularidad en el partido ante el Huesca.
Jugó también ante el Getafe en casa y el Betis en el Villamarín. En el estadio sevillano realiza una gran parada a un cabezazo de Feddal. Pero no puede evitar la derrota rojiblanca contra los de Quique Setién. Todo esto antes de recibir al Real Madrid en el Metropolitano.
En ese derbi, no realiza ninguna parada decisiva y el Atlético cae por 1-3. Estuvo a punto de parar el penalti tirado por Sergio Ramos, pero lo ajustó muy bien el de Camas.
Después del derbi encadenó cinco porterías imbatidas de manera consecutiva, cuatro en la Liga (Rayo, Villarreal, Real Sociedad y Leganés) y la ida de octavos de Champions ante la Juventus. En ese período de tiempo realizó alguna que otra parada y el Atlético sumó un total de 8 dianas a favor.
Después de estar cinco partidos sin encajar gol, llegó la Juventus en Italia, donde se vería una pobre versión del Atlético, que fue aprovechada por Cristiano Ronaldo, jugador que marcaría tres dianas. La segunda se pensó que Oblak había hecho un paradón pero el balón superó la raya de gol. El esloveno hizo una gran parada a Chiellini en otro córner. El Atlético cayó en la Champions.
Tocado por la derrota en Europa, el Atlético volvió a perder pero esta vez en Liga contra el Athletic en San Mamés. Perdió por 2-0 y Oblak evitó males mayores parando una clara ocasión de Ibai.
Luego los de Simeone ganaron 0-4 al Alavés en Mendizorroza, con Oblak como titular. Hizo alguna que otra intervención. El portero esloveno jugó en Mendizorroza su partido 200 con el Atlético de Madrid.
Seguidamente los del Manzanares vencieron al Girona en casa tras la eliminación en Copa del Rey, por 2-0.
El 6 de abril se jugó en el Camp Nou un partido crucial por la Liga, un Barça-Atlético de Madrid que contó con toda la cafeína posible. Diego Costa fue expulsado, mientras que Oblak hizo alguna que otra parada decisiva pero no pudo evitar los goles de Messi y Suárez, en especial el del uruguayo, un perfecto disparo que fue al palo largo con rosca y se coló en la portería del Atlético. El equipo colchonero decía adiós a la Liga en este partido.
Luego Oblak encadenó dos porterías limpias seguidas ante Celta y Eibar. Antes de recibir al Valencia. Al cual ganaron por 3-2.
Posteriormente ganaron al Valladolid por 1-0 nuevamente en casa, con un polémico penalti de Arias que no se pitó. Oblak nos dejó algunas paradas. Y el Atleti evitó que el Barça ganara la Liga sin jugar.
Contra el Espanyol no pudo evitar la derrota rojiblanca por 3-0, a pesar de sus grandes intervenciones. Borja Iglesias marcó un doblete.
Disputó su último partido del curso en casa ante el Sevilla, en la despedida de Godín del Wanda. Encajó una diana y el Atlético empató. Con este resultado los de Simeone ya eran segundos matemáticamente en Liga.
Oblak no fue convocado al último partido de Liga en el Ciutat de Valéncia, donde el Atlético empató contra el Levante a dos goles. Adán ocupó su sitio.
El Atlético despidió la temporada en un amistoso en Jerusalén contra el Beltar, donde Oblak vio los 90 minutos en el banquillo.
Oblak empezó la temporada 2019-20 siendo titular en el Memorial Jesús Gil y Gil contra el Numancia, jugando 45 minutos. Fue el capitán del equipo. Esta vez disputó toda la pretemporada con el equipo del Metropolitano, empezando en dicho partido. Volvió a jugar 45 minutos en el partido de la International Champions Cup contra el Chivas Guadalajara mexicano.
Disputó los 90 minutos del derbi jugado en el MetLife Stadium contra el Real Madrid. En ese encuentro provoca la lesión de Jovic tras un choque con el portero.
Entró como suplente en el partido de las estrellas de la MLS, al igual que todo el equipo titular del Atlético. El conjunto madrileño ganó por 0-3.
Jugó 66 minutos en el partido ante el Atlético San Luis cometiendo un fallo en el gol de los mexicanos.
Contra la Juventus jugó los 90 minutos, en una victoria del Atlético en la que Oblak fue decisivo con algunas paradas. Junto con Joao Félix fue el mejor del partido.
A partir de aquí, Oblak fue titular en los 38 partidos de Liga, y en todos los de la Champions, y el cambio por precaución en el REALE Arena contra la Real fue lo único que le privó de disputar todos los minutos de Liga. En Champions el Atlético cayó contra el Leipzig en cuartos de final. Y en Copa el Atlético pagó muy caro no haberlo llevado porque cayó por 2-1 ante la Cultural. En la Supercopa, jugó los 210 minutos reglamentarios y participó en la tanda de penaltis de la final ante el Real Madrid.